VIF: Qué Es la Inmunodeficiencia Felina

VIF: Qué Es la Inmunodeficiencia Felina

VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina, una enfermedad infecciosa que ataca a gatos de cualquier edad y que en ocasiones no muestra ningún síntoma por mucho tiempo. No dejes de leer, aquí te contaremos que es inmunodeficiencia felina

El Virus de la Inmunodeficiencia Felina o VIF es una enfermedad relativamente frecuente en los gatos domésticos que viven en la calle.

Fue descubierto en el año 1986 por investigadores de la Universidad de California, Estados Unidos.

A pesar de que los gatos contagiados permanecen infectados por el resto de sus vidas muchos de estos animales no presentan síntomas pudiendo vivir muchos años cómo portadores y transmisores de la enfermedad.

Por otro lado, el VIF es un tipo de virus específico, y es por esta razón que no es posible el contagio a los humanos y solo infecta exclusivamente a los gatos.

¿Qué es el VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina?

El VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina es una enfermedad de carácter infeccioso que ataca el sistema inmunológico causando que el gato se encuentre en una posición vulnerable a un sinnúmero de infecciones y afecciones. 

El VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina ataca de forma muy extraña ya que, en ocasiones, el gato no presenta ningún síntoma durante años y de repente se manifiesta dejando que las bacterias, protozoos, hongos o cualquier virus que normalmente son inofensivos causen estragos en el animal. 

Un gato infectado con el VIF puede llegar a vivir una vida promedio si es monitoreado regularmente. 

Sin embargo, no debe compartir vida con otros gatos.

Se estima que más de un 10% de la población felina a nivel mundial está infectada con el VIF. 

Aunque quizás el porcentaje sea mayor ya que algunos gatos son asintomáticos. 

El VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina no afecta a los humanos ni a otras especies. 

En la actualidad no existe una vacuna contra el VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina.

¿Cómo se transmite el VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina?

El VIF se transmite entre gatos a través de heridas por mordedura, por contacto cotidiano o acicalamiento o, incluso, por compartir recipientes de comida o agua con un gato infectado. 

Mayoritariamente el virus pasa de un gato a otro por la saliva.

En raras ocasiones, una gata con VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina puede transmitírselo a sus gatitos a menos que se contagie durante el embarazo. 

No es factible que un gato contraiga el virus por contacto sexual pero si por peleas o mordeduras durante la copulación. 

¿Cuáles son los síntomas del VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina?

El VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina presenta tres fases. 

La fase aguda es la fase de infección inicial y se manifiesta entre 1 y 3 meses después del contacto con un gato infectado. 

Durante esta fase el virus afecta los ganglios linfáticos provocando un aumento desproporcionado de estos generando episodios de fiebre, depresión o inapetencia.

Esta fase suele durar poco tiempo.

Posteriormente, el gato atravesará por una fase asintomática, que dependiendo del estado del animal puede durar meses o incluso años. 

Durante este período los gatos no muestran ningún tipo de afección, pero si se les realiza un análisis de sangre presentarán niveles bajos de glóbulos blancos y aumento de proteínas. 

Existen algunos casos en que el virus simplemente estará presente pero nunca se activará. 

Finalmente, el virus atraviesa una fase progresiva donde continuará activo comprometiendo el sistema inmunológico y provocando que el animal sea objeto de infecciones secundarias. 

Los gatos afectados pueden presentar infecciones de piel, ojos, vías urinarias o vías respiratorias. 

También, pueden presentar problemas en las encías o gingivoestomatitis.

Como el VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina ataca el sistema inmunológico del animal, un gato afectado será más propenso a contraer cáncer o presentar convulsiones o cambios de comportamiento por trastornos neurológicos. 

Si un gato presenta este nivel de afecciones, las probabilidades de vida disminuirán considerablemente. 

¿Cómo se diagnostica esta enfermedad?

Es de suma importancia realizar una prueba de VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina antes de llevar un gato a casa. 

Esto no quiere decir que si el animal sale positivo en la prueba no le podamos ofrecer un hogar, pero debemos estar claros en qué condiciones lo hacemos. 

El diagnóstico también es importante si tienes un gato y tienes intenciones de llevar otro, si tu gato está en semi-libertad o si tu gato se enferma con frecuencia. 

El diagnóstico es muy sencillo y solo requiere una prueba de sangre donde se detectará la presencia de anticuerpos del virus. 

¿El VIF es lo mismo que el Sida Felino?

El hecho de que un gato sea positivo en VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina indica que se han formado anticuerpos por la infección, pero quizás nunca desarrolle los síntomas típicos del Sida Felino. 

¿Cuál es el tratamiento para el VIF?

Un gato infectado puede recibir tratamiento para cualquiera de las infecciones secundarias producto del VIF, pero, desafortunadamente, estas infecciones secundarias pueden volver a presentarse o se presentarán afecciones nuevas y diferentes al estar el sistema inmunológico comprometido. 

Existen algunos protocolos que han sido utilizados que incluyen retrovirus que han demostrado tener algo de éxito. 

También, se utilizan inmunoestimulantes o vitaminas. 

En este sentido tu veterinario será el indicado para asesorarte en el tratamiento de tu animal. 

¿Cómo evitar el contagio de VIF o Virus de Inmunodeficiencia Felina?

Debido a que la mayoría de los contagios son por mordedura, podemos minimizar el contagio si castramos a nuestro gato. 

La castración evita las peleas en épocas de celo o por territorio. También, puedes evitar que tu gato salga a la calle.

Si tienes varios gatos y uno de ellos está infectado, lo ideal es alimentarlos en comederos diferentes y no dejar comida a disposición y, si es posible, mantenerlos en espacios apartados.


Leave a Reply