El San Bernardo es un gigante noble, devoto y complaciente, con un trabajo invaluable, salvar la vida de viajeros perdidos en los Alpes Suizos. Aquí te mostramos la guía completa de una de las razas más queridas por todos.
Historia del San Bernardo
Se cree que el orígen de esta raza tiene sus raíces en los perros romanos que tras cruces con Mastines, Dogos e inclusive Gran Danés, dieron como resultado al San Bernardo que conocemos en la actualidad.
Allá, por el año 1660 llegó este perro al Hospicio de San Bernardo, un lugar donde los viajeros que iban de Suiza a Italia se refugiaban de las inclemencias del tiempo.
Originalmente, trajeron estos perros para tirar de los carros y como guardianes, pero los monjes pronto notaron sus cualidades como exploradores y su destreza para ubicar viajeros perdidos.
Cuando un perro localizaba un viajero siniestrado, lamía su cara y se acostaba a su lado para darle calor hasta que era rescatado. Durante 3 siglos desempeñaron este papel.
En el siglo XIX la raza comenzó a extinguirse y en un esfuerzo por recuperarla cruzaron los San Bernardo que quedaban con Terranovas, pensando que el pelo largo de estos animales les daría más protección contra la nieve.
El resultado no fue lo que esperaban, ya que el pelo se mojaba y los hacía más lentos.
Por esta razón decidieron volver a la raza original de pelo más corto y los de pelo largo fueron enviados al valle.
Las hazañas de estos grandulones recorrieron el mundo y en 1880 se les dio el nombre oficial de San Bernardo.
Desde entonces, se han convertido en una de las razas gigantes más famosas y queridas por todos.
Rasgos físicos del San Bernardo
El San Bernardo es un perro de gran tamaño, llega a pesar 90 kilos y a tener una altura de 80 cm a la cruz.
Es un perro alto mas no ancho, con una cabeza robusta y una fuerte mordida.
Posee orejas grandes caídas y un cuerpo musculoso de patas largas capaces de recorrer grandes trayectos en condiciones difíciles.
La esperanza de vida de esta raza de perro es de entre 8 y 10 años.
Esta raza puede presentar dos tipos de pelaje, corto y medio. El pelo corto es denso y resistente y el medio es lacio y un poco ondulado.
El color del pelaje es blanco con manchas marrón rojizo que puede variar en sus tonos. El pecho y cuello son blancos y presentan una máscara oscura en la cara.
Temperamento del San Bernardo
El San Bernardo es un animal imponente, pero no es nada agresivo, aunque sería capaz de atacar si la vida de su familia humana estuviera en peligro.
Es un perro tranquilo, amable y paciente, especialmente con los niños y se puede llevar bien con cualquier persona o mascota.
Esta raza tarda en madurar, por lo que tendrás un cachorro por lo menos durante dos años.
Si llevas a casa a este perro pensando en un compañero para hacer ejercicio o jugar, comienza a plantearte la idea de cambiar de raza.
El San Bernardo no es un perro activo, él va a su ritmo, tranquilo y despreocupado.
Tampoco es un perro guardián, pero si llega a ladrar, préstale atención.
A estos perros les encanta estar rodeados de su familia y no son animales que les guste vivir en un patio con poco contacto.
Debido a su corpulencia, puede ocurrir que un San Bernardo sea difícil de manejar.
Por esta razón, es recomendable comenzar su entrenamiento y socialización a temprana edad.
Son perros inteligentes y complacientes, aprenderán las normas con facilidad aunque debes ser paciente ya que pueden ser un poco tercos.
Cuidados y salud de un San Bernardo
El San Bernardo es un perro que necesita ejercicio diario, con caminatas moderadas en un clima fresco o frío. Estos perros no toleran bien el calor.
Necesitan cepillados semanales con el cepillo adecuado y la frecuencia debe aumentar en época de muda.
El San Bernardo es un perro que babea mucho, por lo que debes mantener su cara seca para evitar problemas dermatológicos.
Debes proporcionarle un alimento de primera calidad, pero debes ajustar sus porciones para evitar el sobrepeso.
En lo que respecta a su salud, el San Bernardo es propenso a sufrir cardiopatías, torsión gástrica, entropión y ectropión, displasia de codo o cadera y osteosarcoma.
Visitas anuales al veterinario ayudarán a mantener sana a tu mascota.
El San Bernardo es una raza adorable pero no es para todos.
Si eres una persona organizada y te encanta tener tu casa limpia y ordenada, esta raza no es para ti.
El San Bernardo babea constantemente, muda el pelo en grandes cantidades y ronca.
Además, tiene tanta fuerza que puede tirar los floreros y adornos con la cola sin darse cuenta.
Incluso, podrá llenar de barro tu casa, ya que arrastra con sus grandes patas todo lo que se les atraviesa.
Pero si puedes soportar todas estas cosas, disfrutarás de una de las razas más nobles, adorables y amorosas que hay.