El Mastín Napolitano es un perro imponente pero al mismo tiempo obediente, centrado y amistoso. Aquí te explicamos todo sobre esta raza, descendiente de los molosos romanos.

Historia del Mastín Napolitano

Se cree que esta raza tuvo su origen en los años 700 aC y que fueron los fenicios quienes se encargaron de extenderla por el resto del mundo. 

Para aquel entonces, los perros jugaban un papel importante en las guerras. 

Los perros eran usados como protección, como gladiadores, en espectáculos de circo o peleas y Julio Cesar, en particular, siempre los llevaba consigo. 

En la década de los 40 se definió la raza, pero existía la duda si llamarlo Moloso Romano o Mastín Napolitano, ganando finalmente el nombre de Mastín Napolitano. 

Características del Mastín Napolitano

Ante todo, debemos decir que el Mastín es un perro que intimida, un guerrero poderoso que puede disuadir con su porte a cualquier posible intruso. 

Este majestuoso animal está en la categoría de perros grandes llegando a pesar entre 70 y 100 kilos, siendo las hembras las de menor tamaño.

El Mastín Napolitano posee pelaje corto y de colores negro, atigrado, azul, caoba y gris plomo. 

La piel del Mastín es dura con pliegues a lo largo de la cabeza y cuello y que cuelgan dando la impresión de que se estuviera derritiendo.

Si no te gustan las babas, el Mastín Napolitano no es para ti ya que babea constantemente. 

Temperamento del Mastín Napolitano

Este mastín es un perro poderoso pero noble, aunque muy cauteloso con los intrusos.

Este enorme animal es dulce, leal y estable con sus seres queridos.

El comportamiento que demuestre este perro ante los extraños dependerá de su socialización y entrenamiento. 

No es un perro que ladre excesivamente y la actividad física no es de su agrado.

Por su tamaño y fortaleza es recomendable vigilarlo en caso de que interactúe con niños pequeños o con otros animales, ya que le cuesta trabajo medir su fuerza. 

Cuidados de un Mastín Napolitano

El Mastín Napolitano no requiere ejercicio intenso, pero si de paseos largos diarios, siendo la natación una actividad ideal para él y sus articulaciones. 

Este perro necesita espacio y tener un jardín a su disposición sería ideal.

Un cepillado semanal será suficiente para mantener su pelo en buen estado y una revisión de uñas y limpieza de oídos. 

También, es recomendable que mantengas sus arrugas limpias y secas para evitar problemas de piel.

El calor le afecta, por lo que debes acortar los paseos en los meses de verano.

En lo que respecta a la alimentación del Mastín, esta debe ser de primera calidad y ajustada a su edad y condiciones físicas. 

Salud del Mastín Napolitano

Afortunadamente, esta raza no presenta enfermedades genéticas, pero por tratarse de un perro tan grande debes estar atento y evitar que crezca muy rápidamente.

Por otro lado, en sus años maduros debes evitar esfuerzos bruscos que afecten sus articulaciones.

Algunos Mastines Napolitanos pueden ser propensos a presentar displasia de cadera o codo, torsión gástrica y enrojecimiento de los ojos. 

Para disminuir las probabilidades de que tu Mastín padezca de torsión gástrica, evita poner la comida en el suelo.Para ello, utiliza comederos altos y evita que haga ejercicio antes o después de comer.