Huesos para perros, ¿Son un acierto? ¿Un error? Pues contrario a lo que todos piensan, los huesos son más un error que un acierto. Si sigues leyendo te  explicaremos que debes saber sobre dárselos a tu perro.

¿Son importantes los huesos para perros?

Los huesos especiales para perros son necesarios pues ayudan a los cachorros a aliviar los dolores producto de la dentición, ya que masticar es un medio de disminuir las molestias mientras salen los dientes. 

Así mismo, estos huesos para perros son necesarios para fortalecer la mandíbula ya que el alimento peletizado es fácil de masticar y no requiere mucho esfuerzo.  

Adicionalmente, mantener a un perro ocupado masticando un hueso lo entretiene y, en ocasiones, puede ayudar a prevenir comportamientos no deseados. 

Otro aspecto importante, es que mientras mastica un hueso, tu perro estará mentalmente ocupado y entretenido. 

Esto, lo ayudará en el desarrollo de su cerebro, siendo especialmente recomendable para perros de alta energía.

¿Puedo darle huesos crudos a mi perro?

Es una costumbre generalizada dar huesos crudos o cocinados a los perros. 

Esta costumbre pareciera muy normal, pero lo cierto es que es un error. Los huesos crudos o cocinados resultan ser muy peligrosos y no aportan ningún tipo de nutrientes a tu mascota. 

Los huesos crudos pueden ocasionar trastornos gastrointestinales severos, como vómitos, diarreas y sangrado. 

También, puede llegar a requerir intervenciones quirúrgicas e incluso, puede ocasionar la muerte de tu animal. 

Otro factor a tener en cuenta es que los huesos crudos son portadores de bacterias, como la salmonela, que puede llegar a enfermar a tu mascota. 

Los huesos blandos, como los de pollo, pueden astillarse y perforar el estómago o producir estreñimiento.

Los huesos duros son más difíciles de masticar y pueden causar lesiones dentales.

Incluso, puedes correr el riesgo de que se lo trague entero y deberás recurrir a la cirugía para resolver el problema.

¿Qué tipo de hueso puedo darle a mi perro?

Para ayudar a decidir qué huesos puedes darle a tu perro, debes tomar en cuenta su tamaño y cómo mastica.  

Si tienes un perro de dientes afilados, deberás evitar darle huesos suaves, ya que los destruirán muy rápidamente. 

Algunos huesos masticables están especialmente diseñados para eliminar sarro o ayudar en la salud dental de tu mascota. 

Los huesos de cuero crudo para perro vienen con saborizantes que los hacen atractivos para tu mascota.

Para ello, debes tomar en cuenta el tamaño de tu perro y ofrecerle uno con la proporción adecuada y así evitarás que se lo trague entero. 

En realidad, tu perro decidirá qué hueso de perro le gusta más, por lo que deberás comprar diferentes tipos y ver cuál le parece mejor. 

Evita los de plástico o nylon, ya que tu mascota puede partirlos y tragárselos. 

¿Qué debes tomar en cuenta cuando le des huesos para perros?

Supervisa a tu perro siempre que le des un tipo nuevo de hueso para que decidas si necesitas uno más grande o más duro.

Si tienes más de un perro evita darles huesos cuando están juntos. Siempre habrá un perro que se lo coma más rápido e intente quitarle el hueso al otro, lo que puede ocasionar peleas. 

Si el hueso está muy desgastado y comienza a romperse o es muy pequeño, reemplázalo por uno nuevo.

Para evitar daños dentales o de las encías evita que tu perro mastique su hueso por más de 15 minutos de cada vez. 

Si tu perro sufre de problemas dentales no le des huesos. También, procura que los huesos masticables para perros sean elaborados con productos naturales y sin químicos.