Es importante estar preparados para una emergencia: conocer los espacios seguros de nuestras casas y trabajos, tener una ruta de evacuación y preparar una mochila de emergencia. ¿Y nuestras mascotas? Ellas también deben ser tomadas en cuenta en todas las etapas de prevención y por eso preparar una mochila de emergencia para nuestros perros o gatos es igual de importante.
¿Cómo debe ser la mochila de emergencia de mi mascota?
– Pequeña (tengamos en cuenta que deberemos cargar otra mochila para la familia)
– De tela gruesa o impermeable
– Con dos asas anchas (así podremos ponerla en nuestra espalda y tener las manos libres)
¿Qué debe tener la mochila para mi mascota?
- Agua y alimento
Lo más importante. Procura tener dos botellas de agua exclusivas para tu mascota y bolsas o latas de comida (dos unidades y que tengan ‘abre fácil’). Asegúrate que las fechas de vencimiento del alimento sean lo más extensas posibles.
- Correa
Una mascota puede aturdirse por el nerviosismo y la ansiedad de las personas durante una emergencia, por eso es importante contar con una correa adicional dentro de la mochila para asegurarnos que nuestra mascota no correrá o escapará.
- Manta
Esta servirá para proteger a nuestra mascota y abrigarla en las horas siguientes a la emergencia.
- Un juguete
Puede servir para llamar su atención y hacer que vuelva a nuestro lado si es que se alejó en algún momento.
- Medicamentos
Si nuestra mascota sufre de alguna condición médica, es importante tener suministros extras de sus medicinas regulares para administrarlas en caso de emergencia.
- Plato para comida
Tener un pequeño plato de comida o táper plástico donde poner el alimento y el agua es ideal para alimentar a tu mascota en estos casos.
- Paños húmedos
Para limpiar el cuerpo, la cara o las patas de tu mascota de ser necesario.
¿Dónde colocar la mochila de emergencia?
De nada sirve guardar la mochila de emergencia en un closet, pues durante un sismo, inundación, incendio u otro acontecimiento no podremos ir a buscarla. Coloca la mochila en un lugar visible y accesible que esté en la ruta de evacuación de tu casa/trabajo (cerca a la puerta o escaleras).
